En una carta dirigida a los tres niveles de gobierno, los obispos de la Diócesis de San Cristóbal y su cuerpo de vicarios denunciaron que no ha sido escuchada la población afectada por los grupos del crimen que se disputan el territorio en Chiapas desde hace casi dos años.
Rodrigo Aguilar Martínez, Luis Manuel López Alfaro, obispos titular y auxiliar, así como María Reyes Arias Sarao, Miguel Ángel Montoya Moreno y Carolina Lara Rodríguez, secretaria y vicarios, detallaron que en la región donde tiene presencia la Diócesis, así como en el resto del estado, existe un incremento de la inseguridad y la violencia desbordada por células del crimen.
“La descomposición social va en aumento por la violencia generalizada en el estado (…) En este tiempo hemos escuchado fuertemente como un grito en el desierto la situación de violencia estructural e institucionalizada con la presencia del crimen organizado, la proliferación de grupos armados, algunos haciendo la tarea de grupos de choque”.
Refieren una lista de municipios donde la situación es más álgida: Chicomuselo, Comalapa, Trinitaria, Comitán, Margaritas, Maravilla Tenejapa, Zamora Pico de Oro, Palenque, Salto de Agua, Tila, Yajalón, Chilón, Ocosingo, Altamirano, Chanal, Oxchuc, Huixtán, Tenejapa, Chamula, Chenalhó, Pantelhó, Simojovel, Chalchihuitán, San Cristóbal, Teopisca, Carranza, Las Rosas, Socoltenango, entre otros.
“Ésta realidad de inseguridad se agudiza en algunos sectores de la población amenazada por grupos del crimen organizado para incursionar en el manejo y la comercialización de armas de fuego (…) Denunciamos también la fuerte impunidad que prevalece en el estado”.




