Un hombre y sus dos hijos —entre ellos una niña de 12 años— fueron asesinados en su propia parcela ubicada en la comunidad El Piru, municipio de Márquez de Comillas, en la franja limítrofe con Guatemala. Las víctimas fueron identificadas como Lorenzo David ‘N’, el propietario del terreno; Sergio ‘N’, de 23 años; y una niña de 12.
El ataque y los primeros hallazgos
Testigos señalan que el propietario ya había sorprendido previamente a hombres armados dentro de su parcela, quienes presuntamente ingresaban para caza furtiva desde Guatemala. Este acto provocó que en esta ocasión acudiera acompañado de sus hijos al predio, donde se dio el enfrentamiento letal. Las autoridades encontraron múltiples casquillos percutidos alrededor del área del crimen. Los cadáveres fueron localizados con apoyo de la Fiscalía General del Estado, policías municipales, Guardia Estatal y Ejército, que abrieron una carpeta de investigación por homicidio calificado.
El contexto y la respuesta institucional
La región selvática donde ocurrieron los hechos presenta condiciones de alta vulnerabilidad: caminos poco prácticos, escasa vigilancia y la presencia reiterada de personas armadas al margen de la ley. Las familias de la comunidad exigen que no solo se registre el hecho, sino que también se identifiquen y detengan a los responsables, se aseguren los predios y se genere un mecanismo de prevención efectivo para evitar nuevos crímenes.
La acción criminal ha encendido las alarmas ante el riesgo que corren las personas que defienden sus tierras o denuncian la entrada ilegal de cazadores o grupos armados en zonas fronterizas. Las autoridades deberán esclarecer el móvil exacto del crimen —si fue exclusivamente por la caza furtiva o si hay un trasfondo más complejo— y ofrecer resultados que permitan restablecer la paz en la zona.
